Luchas, peleas, te revuelves. No te das por vencido pero dentro de ti sabes que vas a perder. Aun así insistes en que desaparezca de tu vida pero es que no tiene claro si lo que quiere es irse o llegar más dentro de ti. Vuelves a sacar el pañuelo y sueltas fuerte todo el aire estancado en tu fosa nasal pero el resultado es el mismo, esa pseudo-especie de verde plastilina ha llegado a ti para quedarse.
<= Con hilo musical
Adiós
Hace 4 años
1 comentario:
Vaya, qué molesto. Ahí sólo queda una solución: meñique. Y si tampoco funciona, entonces estás perdido.
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