![](https://lh3.googleusercontent.com/blogger_img_proxy/AEn0k_v0fb8FHibV_S_jonlNuZAxatIGhm5cinJBn6SQcItJamDf5ZvIGK3uY2vL2wDz2WlyCBAdo24ri6vHN95iZ24Fu1wu93UUdwkRmCyeNcY=s0-d)
Relájate. Yo estoy aquí para sostenerte, pero aunque lleve tu peso, eso es lo que me hace poder aguantar la posición y casi siento que eres tu quien me mueve a mi. Mantenerte ahí es lo que me da aliento para seguir junto a ti. Tú te mueves y yo, no te sigo, yo ya estoy ahí contigo. Rodamos, nos movemos sobre nosotros mismos, nos exploramos. Intentamos llegar hasta lo más profundo de nosotros, atrayéndonos y capturándonos. Y de pronto, nuestros centros están conectados, por un instante, con tan solo visualizarlo y un pequeño movimiento de mi dedo, te vences sobre mí entre sudores que emanan por la emoción de haber alcanzado la plenitud, tus dedos de los pies se estiran y te mueves con nervios como entre espasmos. Y, sonriéndome, me cuentas que todo ha salido perfecto.
![](https://lh3.googleusercontent.com/blogger_img_proxy/AEn0k_v5tNeqJ2arGfa6gMBoOzqsvydce5c8LCOFcoPhsQctDESVFhtGKXV9aWAceO8rFJX9lkUEsNGbujuUitPgkXnPC-9r-UuEDTJ90-mJcU5kz13CG5MDaoiMJsU8q6Yoz1fHNFAyZASM04XPlDQimQ=s0-d)
¿¿??